Miércoles, 01 Abril 2015 18:32

Una boda llena de detalles… La Boda de Laura y Jose (II)

¡Muy buenos días!

Sabemos que estáis esperando como agua de mayo la segunda parte de la boda de Laura y Jose.

Una vez convertidos en marido y mujer, nos dirigimos al Realengo, como ya habíamos mencionado en el anterior post. 

Allí les esperaba a los invitados un refrescante mojito, y para crear el ambiente necesario, habíamos decorado cada lado de la mesa con unas cajas llenas de limones y albahaca.

Y en hall de la finca el Realengo habíamos puesto unos carteles que decían “pasado”, que miraban hacia la puerta, otros con la palabra “presente”, que estaba colocado en el lugar donde estaban los mojitos, y otro cartel que ponía “futuro”, indicando hacía el lugar de la celebración. Como comentamos en el anterior post, estos carteles los había hecho Jose.

El sitting nos quedó de lo más otoñal con un biombo que Laura y yo vimos por casualidad en una de nuestras reuniones en la finca. Los nombres de las mesas eran de árboles: castaño, manzano, naranjo…, en honor a Jose, que es un enamorado del campo. En la parte inferior del biombo para volver a crear ambiente pusimos unas cajas que contenían, piñas, castañas y nueces.

Tras el estupendo almuerzo, Laura le entregó a su madre el ramo de novia y repartieron los jabones artesanales que tenían como regalo para sus invitados; después de cortar la tarta, llegó el momento: el baile, un baile marcado por pompas de jabón ;)

¿Y después del baile qué ocurre? ¡¡¡Barra libre!!! Sorpresas tras sorpresa…

Empezamos por el libro de firmas, que no era un libro de firmas corriente, sino un caballete que contenía un árbol donde, cada invitado dejaba su huella, en la que pusimos dos recipientes con chapas que contenían mensajes divertidos: “No encuentro a mi media naranja, será porque soy Pera”, “Lleno, por favor”, “Esta, otra y nos vamos”…

La temática del photocall era el salón de una casa, un simulacro de pared, con fotos de los novios y dos sillones en cada lado.

La Candy Bar fue otro de los éxitos que Laura y yo encontramos en una de nuestras reuniones. Una estantería que hasta ahora nadie se había fijado en ella en la finca y nosotras supimos sacarle todo el partido, convirtiendo la Candy Bar en una frutería.

Ummm… ¡qué bien huele! ¡Palomitas de maíz! ¡ACIERTO 100 x 100! Un carrito de palomitas durante la barra libre: increíble olor y mejor sabor ;)

Y para terminar, no podía haber un detalle más malagueño, que contratar a un señor de la famosa calle Larios, que estuviese durante la barra libre con su puesto de almendritas. ¡Si lo de las palomitas era un acierto 100 x 100, esto era un 200 x 200! Vale, nos vamos a casa con 5 kg de más, pero creo merece la pena ;)

Llegados a este punto me da pena tener que dar por finalizado los posts de la boda de Laura y Jose, aunque es cierto que ya han pasado algunos meses desde la boda, (¡Sorry, no me había dado tiempo!), me ha encantado recordar cómo transcurrieron aquellos días y la boda tan bonita que finalmente les quedó. Desde aquí les doy las gracias por haber confiado en mí.  

Laura y Jose, es muy fácil trabajar con gente como vosotros, con ilusión en cada cosa que se proponen y hacen. Os deseo lo mejor en vuestra vida, y una vez más ¡GRACIAS! por confiar en mí.

FOTOS: JOSÉ BERNAL